Chimbote sumido en Tinieblas
Ocho pelotones de la muerte, ocho bandas de guerreros apocalípticos arribaron a Chimbote ayer poco ates de la media noche y lo sumieron en las tinieblas, trayendo consigo el terror, el miedo y la angustia durante cinco largas horas…
Fueron pocos los que se enteraron previamente del horror que abordaría a nuestra ciudad. Como siempre casi nadie está consciente de verdades tan crudas como las que ocurrieron ayer. La mayoría sufre un adormecimiento que los desconecta de tales realidades. Sin embargo, “los pocos” fueron como siempre a hacerles frente, preparados anticipadamente se enfrentaron al terror con valentía y fortaleza, dejaron todo en el campo de batalla y, aunque el saldo fue fatal, lucharon en una guerra a la cuál siempre han esperado…
El Apocalipsis comenzó con Agor, una banda de heavy metal que recién empieza a pisar la difícil escena under de Chimbote. Buen desempeño en los covers de Dio y sobre todo haciéndonos recordar buenos temas de Ozzy Osburne como Mr. Crowley y Perry Mason.
El segundo batallón fue la banda Diamante Negro, los cuáles vienen consolidándose en los conciertos de rock y metal de la ciudad. Un buen comienzo con The Hellion-Electric Eye, cover de Judas Priest, y posteriormente For Whom The Bell Tolls, un cover de Metallica de buena performance y puso al público a moverse con mucho Headbanging. Finalizaron con un par de temas propios como Soldados del Infierno.
El mejor Hard rock vino con Stonehead, quienes reafirmaron el por qué de su aceptación en el público chimbotano que sabe de buena música. Un rock & roll sucio y forntal, directo en su temática y en su composición musical. El tema I am rebel nos envolvió en ese sonido que encaja también dentro de la vieja escuela del heavy metal. Todos sus temas nos mantuvieron en movimiento hasta el final con el tema Toda La Noche Con Alcohol.
El cuarto batallón vino con la banda Lemmings, quienes el día de ayer nos trajeron un setlist de covers que nos hizo recordar aquella época de los conciertos under en Chimbote de inicios de los 2000. Iniciaron con Hit The Lights de Metallica. El tema Master Of Puppets nos metió en la potencia del thrash metal. Luego vendría el tema Hellowed Be Thy Name, que metió en el desenfreno a la gente que gusta del buen heavy metal. El setlist lo completarían los temas Iron Maiden y The Trooper, que mantuvieron al público moviéndose y coreando.
Mandrágora hizo lo propio con buenos temas de heavy metal. Esta banda junto Stonhead han mantenido a la escena under chimbotana impidiendo que se apague a pesar de la falta de iniciativa en Chimbote por organizar buenos concierto de rock y metal. Mandrágora sorprendió con sus últimas composiciones, entre las que figura el tema Nightmare, de buena composición, que nos metió en el clima propio de la temática.
Luego de esto empezaría a acentuarse la oscuridad y la angustia en Chimbote, empezando con el regreso a escena de la banda Iniciom, los cuáles tuvieron un lugar en la escena metal underground de Chimbote a inicios de esta década, habiendo participado en Trujillo junto a Anal Vomit (Lima) y en Chimbote junto Flagelum Dei (Lima). Sus composiciones tienen diversas influencias, sin dejar de desvincularse del clima black. El público chimbotano respondió con aplausos a esta propuesta que han retomado sus integrantes. De esta manera el escenario quedaría listo para los invitados de fondo de la noche.
Inhumano arrastró al público al caos y al pandemonio desde el inicio con una buena puesta en escena. Sus composiciones son crudas y angustiantes, y ése fue el clima que lograron implantar. Sus músicos demostraron destreza y solidez, reafirmando el por qué es una banda que viene consolidándose en la escena nacional, habiendo sido invitados a tocar en otras ciudades como Cajamarca y Lima.
El Apocalipsis de la noche terminaría con el ataque de Belzec, banda de black metal de la ciudad de Lima, quienes tocaron temas de su producción The Art Of Holocaust, puro black metal oscuro y frío, con buena puesta en escena que incluyó el maquillaje black y candelabros. El público metal no se despegó del escenario hasta que dejó de tocar esta buena banda, quienes cerraron con creces el concierto.
Se hizo extrañar la banda de thrash metal Metralla de Nuevo Chimbote, ya consolidados en la escena metal underground, quienes no pudieron estar presentes en el concierto por motivos particulares.
En resumen, y a pesar de problemas con el sonido, este concierto fue de los mejores que ha habido últimamente en Chimbote, ciudad donde usualmente se escuchan ritmos míseros e inútiles, y la que incluso las autoridades promueven, rindiéndole culto a la pobreza musical y cultural.
Noctem